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Alergias Estacionales: Síntomas, Tratamientos Y Consejos

Alergias estacionales: síntomas, tratamientos y consejos

Las alergias estacionales se caracterizan por una serie de síntomas (no necesariamente todos respiratorios, véase más adelante) que se presentan sistemáticamente en la misma época del año. Son causadas por la hipersensibilidad a ciertos pólenes.  Se calcula que aproximadamente 1 de cada 4 personas padece alergias estacionales durante alguno o todos los periodos propensos a la alergia, lo que las hace extremadamente comunes:

  • Primavera (de mediados de marzo a finales de junio): alergias a ciertos árboles y arbustos.
  • Verano (de finales de mayo a mediados de octubre): alergias a las gramíneas como la hierba, el trigo, el maíz, etc.
  • Otoño (agosto a octubre): otras plantas que polinizan en otoño.

Este año, las alergias estacionales son especialmente intensas, según muchas personas. Esto se debería al cambio climático.

Causas de las alergias estacionales

Las alergias se producen cuando el organismo reacciona de forma exagerada al exponerse a determinadas sustancias externas, como el polen de ciertas plantas.

Aunque no se conocen las causas exactas de por qué sólo algunas personas se ven afectadas por estas alergias, la ciencia sabe que la genética desempeña un papel importante.

Las alergias son una reacción inmunitaria: el cuerpo del enfermo identifica el polen como un “agresor”, aunque la sustancia sea en realidad inofensiva. Por lo tanto, el cuerpo produce anticuerpos y crea una inflamación para luchar contra esta sustancia, lo que provoca los diversos síntomas que se experimentan, que son los de una reacción alérgica.

Los principales síntomas de las alergias estacionales

La mayoría de los síntomas son de origen respiratorio, pero hay muchos otros:

  • Secreción nasal
  • Congestión nasal
  • Estornudos repetidos 
  • Tos
  • Lágrimas (ojos que lloran solos)
  • Ojos rojos, hinchados y con picor
  • Dolores de cabeza
  • Picor en la nariz, la garganta y el paladar
  • Dolor de garganta
  • Voz áspera
  • Piel irritada y con picores
  • Alteraciones del sueño y fatiga (cuando los síntomas son persistentes)
  • Irritabilidad y dificultad para concentrarse
  • En algunos casos: ataques de asma y/o urticaria, eczema.

Tratamiento de las alergias estacionales

Para el tratamiento de las alergias estacionales existen varios medicamentos de venta con y sin receta médica. Se dividen en varias familias:

  • Antihistamínicos, que bloquean la producción de histamina (la sustancia que provoca las reacciones alérgicas).
  • Descongestionantes: en forma de sprays, pueden irritar las mucosas, por lo que sólo deben utilizarse de forma muy esporádica.
  • Corticoesteroides nasales: Se trata de medicamentos antiinflamatorios disponibles sólo con receta médica cuando los medicamentos de venta libre no son eficaces.
  • Corticoides orales: también por prescripción médica, y por períodos muy cortos de tiempo debido a los efectos secundarios indeseables.
  • Antidepresivos: en aerosol o gotas, también tienen una acción antihistamínica.

También son posibles los tratamientos de desensibilización, pero estos tardan varios años y sus resultados no están garantizados.

Prevención de las alergias estacionales

La única forma eficaz de evitar las alergias estacionales es reducir la exposición a los alérgenos causantes. Por ejemplo:

  • Limita las salidas al exterior, o al menos cuando el polen está más concentrado en el aire (entre las 8 y las 12 de la mañana) y cuando hace mucho viento.
  • Mantén las ventanas cerradas.
  • Utiliza el aire acondicionado.
  • Utiliza gafas de sol cuando salga a la calle para evitar que las esporas del polen entren en los ojos.
  • Evita secar la ropa en el exterior: ¡recoge el polen!
  • Lávate las manos y el pelo con frecuencia.
  • Lava las sábanas, almohadas y mantas con frecuencia.

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